Se trata de una necesaria obra vial ubicada sobre el río Zapote en Brasilito, que es clave para el paso de personas y vehículos que van a muchos sitios costeros santacruceños y de cara al futuro, podría ser vital para la llamada Ruta del Sol, que por un camino rústico transitable, uniría las playas de Liberia y Carrillo, con mucha economía de kilómetros.
Para concretar esos trabajos se invirtieron ¢700 millones y de acuerdo con los vecinos es un “regalo adelantado de Navidad”, porque ahí se formaban largas filas, debido a lo estrecho de una vía, mientras que ahora son dos carriles lo cual permite el paso rápido de los usuarios.
Pablo Camacho, gerente de Construcción de Vías y Puentes del MOPT, señaló que el paso vial tiene 25 metros de largo y 10.6 metros de ancho, con los dos carriles de 3,65 metros de ancho cada, además de aceras de 1,2 metros a cada lado, de modo que las personas que caminan a pie puedan hacerlo con seguridad.
Las pasarelas peatonales cuentan con barandas hacia el exterior y otra a lo interno, para separar a los transeúntes de los automotores. La obra incluyó la intervención de los accesos de aproximación, con pavimento flexible (carpeta asfáltica) y se hicieron acera a ambos lados.
Be the first to comment