Señor
José Manuel Peña
Periódico Anexión
Mi muy estimao amigo:
Hombre Peñita, ya pasaos el tremolín y las mojigangas de los días de julio, uno bastante curtido con el chingaste quesas samotanas siempre dejan, áhi nomasito al calorcito de las conocencias viejas, va quedito buscando las calmas de las quietudes del campo, enmedio de las tranquilidades y el cobijo de las soledades del monte. Sí pariente, nuay como el remedio criollo sabanero, medicina pura para dejar regaos porái los tequios y los pesares del buche y del alma. Comonó mi hermano, si hasta curan cabangas desas barcinas y los nervios que le agarran a uno diun pronto a otro, y que lo dejan de viaje todo bien achumicao mi amigo.
Pero en estas cuestiones, a los pocos dillitas uno ya bastante sereno va cogiendo juelgo, completando la repunta del espíritu enmedio de las tranquilidades que deparan las tardecitas desta tierra bendita. Sí pito, atardeceres queditamente bañaos poresos celajes, crepúsculos que traen los aromas y los colores de las floradas del llano, fragancias claritas del monte al atardecer mijito.
Si mi compañero, como dice un amigo del lao de Cárdenas, en esto de los remedios llaneros y el sornaguello tilinte que les coge, si
uno se pone vivo y no se deja talmequiar, las penas y las dolamas se vuelven puramente como el moto y el alcaraván que juntamente asi que crecen, áhi nomasito con la misma se van. Si pito, estando en estas cavilosadas, el otro día memoriaba quiantes, logrando las sabroseras de los tiempos lindos, agarramos por esos ríos limpitos a pescar y andareguiar montiando. Si hom, que sabroso era arrodajao en el raicero diuna sombrita echar la cuerda en las pozas azulitas poron de la calmura solo era rota por los gallegos que pasaban eschilampaos partiendo las
quietas aguas, o por las güirrizas desgajándose asustadas en los resecos paredones.
Eran ratos lindos compañero. No se diga, imagínese solo el tirito de buscar carnada en la hojarasca sombriadita poresos espavelones viejos que largaban sus gusanitos, esos que acarenciaban al peje que vivía en las pozas mansitas. Que decir de lo que se sentía cuando el guapote en su desatino derrepente arrequinta la cuerda bien chambona o corriendo a lo largo también el barbudo pegaba su jalón. Eran y siguen siendo placeres lindos mi hermano, son sabroseras del llano que las necedades del hombre y del tiempo están empeñaos en fregar y jocotiar papito.
Comonó papa, comonó pito. Como bien sabe compañero, en estas cuestiones uno solamente buscaba coger lo necesario, digamos apenas como quitar un antojo, una comidita, dejando quieta la nacencia y que siguieran los ríos cundidos. Sí hom, como quien dice lo que llaman horita pura ecología legitima cuñao. Si hom, pero que va señor, con tanto químico y tanta apiadera de montaña, los ríos están barridos y las cosas y los animales sestan acabando, quedando casito todo de viaje como sin remedio pariente.
Hombré mi estimao, que le digo de las noches veraneras en los tiempos de buscar la fresca y darse gozadas en las coyoleras. Eran y siguen siendo los tiempos de libar aquella dulce savia que mana alegremente de coyoles arreglaos en creciente. Casualmente porái en los rincones del tabanco tengo unos versíos sabaneros quial puro final dicen así: Mi coyol cascabelero, dulce savia de los llanos, quien pudiera
sostener el espíritu fiestero, que derramás en los hombres como alegre verdolaga, endulzando la bravura del centauro sabanero.
Qué le pareció mi amigo. Ve como también en veces miagarran chalanadas y lirismos diría el finao mi compadre Cirilo, Comonó pápa, comonó pito, de vez en cuando saco mis buenas plumas papito. Algo así como dijo un hombre grande, de músico pueta y loco todos tenemos un poco mi cabito. Legítimamente alegre pico dijo Piano.
Si hom, aquí se ve clarito que a los contratiempos ligerito siempre le sacamos punta, algo parecido aqueo que dice quen las tuerces de la vida nuay que buscarle la vuelta al cacho que de todos modos el soncoyo solo toretas echa cuñao. Si hom, La cuestión es como uno quiera mirar las vainas, suspenderse livianito y por nada del mundo dejar que liagan nidada, no sea que de viaje se emburrique y adiós mis flores compañero.
Comonó pito, comonó, y ya de pasadita y para no quitarle más el tiempo en la de menos me doy una zafadita por las fiestas del pueblo, quien quita este cacaste viejo se resuelva y a punta de vaqueta darle gusto a varios de los pailetos que van a jugar ese día.
A lo mejor su persona, ya más repuesto de sus quebrantos, pueda darse una vueltecita por estos laos y al calorcito diunos buenos quitapesares desos bien claritos, podamos gozar del jolgorio y las alegrías que tienen siempre las fiestas de nuestra querida tierra compañero. Si señor aquí dejo y aquí mismo dejo mis letanías compañero.
Su paisano nicoyano:
Crecencio Aguirre Rosales
Nambí de Nicoya
25 de setiembre del año 2023
Aclaraciones varias
Alcaraván. Ave zancuda que canta cada hora.
Barbudo. Pez de rio, negruzco, sin escamas y muy alaste.
Barcinas. De color indefinido. Fregadas.
Cacaste. Esqueleto y cuero reseco por el sol.
El Cuerpo.
Conocencias. Saberes, conocimientos.
Coyol. Palmera que produce la savia llamada coyol.
Chingaste. Residuos, rescoldos, sobros.
Gallegos. Garrobitos.
Guapote. Pez de rio de carne muy sabrosa.
Güirrizas. Garrobos.
Moto. Solo, desamparado
Nacencia. Nacimientos, rebrotes.
Pailetos. Res de cuernos largo y muy abiertos.
Quitapesares. Tragos grandes de licor.
Samotanas. Alboroto, bochinche.
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