BN celebra 110 años: Cinco momentos históricos desde el impulso al agro hasta el fortalecimiento de las pymes

• Entidad fomentó la creación de las Juntas Rurales Agrícolas que hoy se conocen como Banca para el Desarrollo.
• Financiamiento inyectado al sector productivo permitió el desarrollo del café, la agricultura y la industria en Costa Rica.

 

¿Cómo se relaciona el desarrollo económico de Costa Rica con el papel del Banco Nacional (BN) en el último siglo? Durante 110 años el BN ha jugado un rol fundamental como motor para impulsar el bienestar del país, primero mediante el fomento al agro y después pasando por diferentes actividades hasta inyectar recursos a los miles de emprendedores y pymes, que en la actualidad representan el 98% del parque empresarial nacional.

“En el marco del 110 aniversario del BN hacemos un reconocimiento a todas las pymes de Costa Rica y destacamos sus aportes al desarrollo económico y social. Desde el nacimiento del banco en 1914 hemos creído en la fuerza que tienen las personas emprendedoras para generar bienestar y calidad de vida a miles de familias, y hemos sido testigos del impacto que generan las pequeñas y medianas empresas al convertirse en fuentes de empleo en todas las zonas de nuestro país”, aseguró Rosaysella Ulloa, Gerente General del BN.

El próximo 9 de octubre el BN celebra por todo lo alto su 110 aniversario y qué mejor forma de hacerlo que repasando cinco momentos históricos que significaron desarrollo y bienestar económico, social y ambiental para Costa Rica:

1- Los orígenes de Banca para el Desarrollo

Desde sus inicios, la institución ha llegado a rincones y sectores de la población históricamente excluidos, como el sector agrícola, con la firme convicción de que impulsar el crecimiento de los pequeños productores es dar un fuerte empuje a la economía del país. El apoyo financiero del BN a pequeños, medianos y grandes campesinos ha sido continuo, reflejándose desde el año de su fundación en 1914, cuando se crearon proyectos como las Juntas Rurales de Crédito Agrícola, hoy conocidas como Banca para Desarrollo. Esto le permitió al BN convertirse en líder del crédito agrícola y rural en el país.

El propósito de estas Juntas fue facilitar recursos a pequeños propietarios que eran víctimas de especuladores comerciales, quienes cobraban altos intereses por los préstamos durante la crisis de la Primera Guerra Mundial (1914-1920). Esta guerra agravó la deuda de los pequeños productores, quienes perdían cosechas y propiedades.

 

2- Impulso al grano de oro y otros cultivos claves

A partir de la década de 1950, el fortalecimiento de las Juntas Rurales de Crédito tuvo un impacto significativo en Costa Rica, facilitando la modernización del sector agrario y ganadero. Además de crédito agrícola, se brindaba asistencia técnica en cultivos como café, banano, cacao y caña de azúcar. Estos préstamos a bajos intereses beneficiaron enormemente a los sectores productivos.

Más adelante, se crearon los Almacenes Generales de Depósito, que contribuyeron significativamente al sector agrícola costarricense mediante el establecimiento de infraestructura para almacenar y conservar productos agrícolas, permitiendo a los agricultores evitar pérdidas por insectos y malas condiciones de almacenamiento. Asimismo, se promovió el cambio a variedades de café más productivas y se fomentaron prácticas agrícolas modernas. Esto no solo ayudó a la economía local de Costa Rica, sino que también contribuyó al crecimiento y sostenibilidad de uno de los productos más emblemáticos del país: el delicioso café costarricense.

El empuje a los cafetaleros también fue notable con el establecimiento de beneficios de café en varias regiones cafetaleras, como San Marcos de Tarrazú, Santa María de Dota, San Isidro de El General, Pérez Zeledón, San Rafael de Puriscal y Cimarrón de Peralta, ayudando a procesar y beneficiar el café de numerosos productores de la zona.

3- El motor de la industria nacional

Durante la década de los años 40 y 50, el BN también fue un aliado clave para la industria nacional. Financiando la construcción de instalaciones, la adquisición de materia prima, maquinaria y herramientas. Esto permitió a industrias como ebanisterías, aserraderos, talleres mecánicos, zapaterías y fábricas de jabones acceder a recursos económicos necesario para expandirse y modernizarse con tecnología, lo que mejoró su competitividad; actualmente el BN continúa trabajando de la mano con las industrias más importantes a nivel nacional, dotándoles de recursos para potenciar sus negocios. Estos cimientos sentaron las bases para lo que actualmente el BN sigue haciendo en beneficio de los sectores productivos del país.

4- Consolidación del sector pyme

En 1999, para modernizar el esquema de las Juntas Rurales de Crédito, se creó el programa BN Pymes, con un plan integral de servicios financieros para las mipymes de todos los sectores productivos de la economía costarricense. Dos años más tarde, nació el Programa BN Desarrollo, que se ha convertido en un hito en la historia financiera de Costa Rica y un modelo ejemplar y pionero en América Latina. Este programa ofrece servicios financieros integrales, rentables y accesibles para micro, pequeñas y medianas empresas, así como para segmentos antes no atendidos por la banca tradicional.

En 2005, para apoyar a la industria, BN Desarrollo impulsó el programa BN Pymex, diseñado para fortalecer a las pymes exportadoras o con potencial exportador, facilitando su inserción en mercados internacionales de América del Norte, América Central, el Caribe, Europa y Asia. Se les ofrecía apoyo en inteligencia comercial y servicios logísticos mediante agencias aduanales y almacenes. Desde 2008, el BN, a través de su programa BN Desarrollo, es parte del Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD), creado por ley en ese mismo año. En 2023, el BN colcó $878,7 millones del SBD, otorgando 51.586 créditos a 18.369 beneficiarios.

El saldo promedio de los créditos a micro, pequeña y mediana empresa, y pequeño productor agropecuario es de ¢12 millones.

5- Formación y acompañamiento integral para pymes

El BN también complementa sus programas con apoyo empresarial, generando desde 2003 más de 60.000 espacios para actividades de capacitación, mejoras en prácticas productivas, alfabetización financiera, ferias nacionales e internacionales, y foros especializados. Esto ha sido posible gracias a alianzas con organizaciones públicas y privadas que desde su especialidad apoyan el fortalecimiento y sostenibilidad de los negocios.

Datos de impacto positivo a las pymes

 

A través de un enfoque integral que incluye desde la asistencia técnica hasta el
financiamiento accesible, el BN sigue impulsando el crecimiento y la sostenibilidad de
las pymes costarricenses, reafirmando así su papel como catalizador del progreso
económico, social y ambiental de Costa Rica.

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